Nuestros Asesores le prestarán con carácter inmediato y sin esperas, en el acto, bien telefónicamente o en persona, la atención y el asesoramiento que usted necesita, sin previa cita, ni trámites previos.

La respuesta a sus dudas o cuestiones serán atendidos de manera personal y directa.

Puede venir a vernos cuando lo necesites.

Llevar bien la contabilidad es la base de la prestación de un buen asesoramiento. Y ello por cuanto de la contabilidad se obtiene la información necesaria para orientar al cliente en una u otra dirección.

Saber en qué gasta, porqué lo gasta y cuanto y cuando lo gasta, puede servir para hacer un adecuado análisis de costes que permita a la empresa tener mejores resultados e igual en cuanto a los ingresos.

Al margen de esto la legislación vigente le obliga tanto si es persona física como jurídica a tener documentada su contabilidad de ingresos y gastos, a través de unos libros de contabilidad.

Si se trata de una persona jurídica o sociedad, además, cada año tienen que estar inscritos en el registro mercantil, siendo además que tratándose de una sociedad la contabilidad deberá seguir las normas del Plan General Contable, en todo su rigor, por lo que es necesario la asistencia de expertos contables para la confección del Libro Diario, Libro Mayor, Cuenta de Perdidas y Ganancias, Balance de Situación, etc.

Asesoria J. Torres esta integrada por profesionales cualificados y especializados en cada una de las materias de nuestra actividad.

Usted dispondrá de un ASESOR directo según la rama o el tipo de orientación de asesoramiento que necesite además dispondrá del asesoramiento de todo nuestro equipo que podrá elaborar si usted lo solicita, un informe de viabilidad y plan de negocio, en el que se analice y diagnostique la evolución de su empresa.

El asesoramiento en equipo, ofrece siempre más confianza y seguridad para su empresa.

El primer paso es obtener el certificado del nombre de su sociedad ante el Registro Mercantil. La dificultad aquí reside en que el Registrador que es quien debe finalmente calificar el nombre, no deniegue la certificación de dicho nombre, bien porque el solicitado se parezca fonéticamente a otro ya reservado, o el solicitado reúna alguna de las prohibiciones que marca la Ley.

El segundo paso sería obtener el código de identificación fiscal (CIF), es decir el DNI de las sociedades, o el número a través del cual se la identifica.

El tercer paso consistiría en la apertura de una cuenta bancaria a nombre de dicha sociedad, con un capital mínimo de 3006,00 €. Si usted carece de liquidez económica puede aportar al capital social, otro tipo de bien, distinto del dinero, siempre y cuando su valor sea igual o superior a 3.006,00 Euros.

Seguidamente y tras la elaboración de los estatutos correspondientes, se otorgaría la escritura de constitución ante notario y posteriormente se liquida el impuesto de transmisiones patrimoniales, y se inscribe la sociedad en el Registro Mercantil.

Estos pasos aunque fáciles suelen tener una duración de un mes aproximadamente para su completa tramitación.

Debe contemplarse el importe de los honorarios profesionales del asesor más como una INVERSIÓN, que como un coste o gasto para la empresa.

La cuantía concreta de lo honorarios vendrá determinada tanto, por la forma jurídica que usted haya elegido para llevar a cabo su negocio, actividad profesional, comercial o empresarial, así como del volumen de actividad que genere dicha empresa y además, dependerá de los servicios que usted desee contratar con la asesoría, ofreciéndose, un servicio de orientación profesional básico, que incluirá las gestiones y trámites mínimos y obligatorios legales o puede elegir, el servicio de orientación integral, que incluirá las máximas prestaciones imaginables necesarias para su empresa.

PERSONA FÍSICA O AUTÓNOMO

Si su negocio o actividad es de reducida dimensión, quizá pueda interesarle gestionar el mismo, como persona física o autónomo. En esta opción usted estará sujeto al Impuesto de la Renta de las Personas Físicas y los ingresos netos de su actividad, tributarán al tipo de gravamen establecido en el impuesto de la renta de las personas físicas con escalas del 19% al 47% según la cuantía de sus ingresos netos. Dentro de esta opción y según el tipo de actividad usted podrá elegir el sistema fiscal que más le convenga.

Estimación objetiva o módulos

En este supuesto y siempre que su actividad pueda estar en este modelo, los ingresos netos de su actividad le vendrán prefijados con independencia de que en la realidad los mismos sean superiores o inferiores a los fijados por la ley.

Estimacion directa

En este supuesto usted tributará fiscalmente a la hacienda pública en función del rendimiento neto resultante de su actividad, es decir a sus ingresos le descontará los gastos y la cuantía resultante será la que quede afecta a la liquidación del IRPF, que en función de ser ingresos mayores o menores se incluirá en una escala de tributación fiscal igualmente mayor o menor.

El capital humano es el mayor capital de una empresa, valorar los recursos humanos, es valorar su negocio y su empresa, como empresario tanto individual como sociedad, usted deberá abrir un código de cuenta de cotización ante la seguridad social, a través del cual usted cotizará, la seguridad social de sus empleados.

Hay múltiples formas de contratación laboral, dependerá del convenio colectivo que rija su actividad, así como de las circunstancias del mercado, de la persona a emplear, del puesto a cubrir e igual al respecto de la duración de los contratos.

Elegir el contrato adecuado, puede suponer importantes ahorros a su empresa, e igualmente estar pendiente de todas las normas laborales que rijan su actividad, le permitirá, una mayor tranquilidad y ahorro de costes.

PERSONA JURIDICA O SOCIEDAD

Si usted prevé que los ingresos de su actividad van a ser altos, entonces quizás lo que a usted le interesa constituir es una sociedad.

Hay muchos tipos de sociedades, la más habitual es la de responsabilidad limitada, que puede ser unipersonal, es decir integrada por un solo socio, o la puede conformar, varios socios cada uno de los cuales tendrá la participación que le corresponda.

Esta figura empresarial tiene la ventaja, de que tiene personalidad jurídica propia e independiente, y por ello de las deudas y obligaciones de la misma no responden los socios con su capital, sino la propia sociedad con su capital social siendo el mínimo de dicho capital 3.006,00 €.

El tipo de gravamen al que va a tributar si elige esta forma jurídica para instrumentalizar su negocio, es del 25% de sus ingresos netos, siempre y cuando los mismos no superen la cuantía de hasta 120.000 €, y el 30% para beneficios netos superiores a 120.000 €.

Otra ventaja de las sociedades es su mayor maniobrabilidad contable y fiscal, que permite al asesor, un mayor margen de libertad a la hora de orientar los resultados de la actividad, obteniendo con ello una optimización fiscal y un mayor rendimiento.

Se podrá deducir todos aquellos gastos, que estando debidamente documentados y justificados sean consecuencia o resulten de su actividad.

Además en determinadas ocasiones podrá dotar amortizaciones que le permitirán dosificar en un periodo de tiempo mayor, una compra de un bien de un importe considerable.